De la mano del CVCS y las organizaciones que lo integran comunicamos a las instancias de poder nacional (rama ejecutiva, rama legislativa y rama judicial) nuestra preocupación frente a cómo la crisis sanitaria detonada por la COVID-19 está convirtiéndose en justificación para toma de decisiones aceleradas, poco transparentes o discresionales.
La toma de decisiones sobre el sistema de salud no puede someterse a los tiempos que impone una emergencia sanitaria. Una ley con implicaciones de una reforma al #SistemaDeSalud no debe ser gestionada de manera acelerada y sin el debate y participación necesarias. #proyecto010
Varios procesos que venían en desarrollo durante años y que su conclusión positiva redundaría en un ejercicio de la salud como derecho cada vez más real y cercano al mandato de la Ley Estatutaria de Salud, han sido suspendidos, aplazados y/o lentificados con la justificación de la limitación de capacidades del ejecutivo para avanzar en todos los frentes. Si bien es entendible que esto suceda durante los primeros meses de una emergencia sanitaria de la magnitud de la actual, no es admisible que esta justitificación se prolongue y marque una agenda de políticas en salud diferente a la ya conocida por todos los actores interesados.
Vea la carta a continuación:
20201105_Carta abierta en salud
