Este 2020 con todas sus particularidades ha permitido que Misión Salud mantenga y proyecte su gestión. A un año de la partida de nuestro fundador podemos compartir un balance que brinda tranquilidad en cuanto a los resultados obtenidos y la capacidad de la organización.
Muchos fueron los escenarios en los cuales Misión Salud aportó en materia del derecho y el acceso a la salud y tecnologías sanitarias.
Desde el primer semestre de este año, cuando recién iniciaban las medidas sanitarias en torno a la declaración de situación de emergencia global, participamos en el análisis y comentarios a las Resoluciones de Pandemia y Derechos Humanos en las Américas de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, así como en escenarios nacionales y regionales de intercambio a propósito de posibles tratamientos y vacunas útiles en el manejo de la COVID-19.
Como uno de los principales resultados de este período de gestión, destacamos la formulación del primer protocolo de estudio enfocado en acceso a medicamentos útiles en el tratamiento de cáncer de mama en Colombia, proyecto conjunto con el Instituto de Salud Pública de la Pontificia Universidad Javeriana.
Uno de los comunes denominadores de esta coyuntura fue la cancelación de grandes eventos , uno de estos fue el Congreso Global de la Propiedad Intelectual, evento que por primera vez tendría como país anfitrión a Colombia, y del que seríamos co-anfitriones. Entonces vimos la oportunidad de realizar la Semana de la Propiedad Intelectual, el Interés Público y COVID-19, en conjunto con Ifarma lideramos el desarrollo de las líneas temáticas de acceso a medicamentos y acuerdos comerciales. Podemos asegurar que fue un éxito rotundo que convocó personas de todos los lugares del mundo. Actualmente la plataforma alberga las grabaciones de toda la agenda y continúa promoviendo diversos intercambios en materia de propiedad intelectual.
Sin duda una de las principales líneas de acción que Misión Salud mantiene consistió en adelantar todas las gestiones tendientes a conseguir que la agenda actual de gobierno reconozca en su agenda a la industria farmacéutica de producción nacional como sector estratégico para el desarrollo económico y social del país, e implemente parte de las acciones propuestas en el documento “Hacia una política de fortalecimiento de la producción farmacéutica nacional con beneficios para la salud pública, el bienestar general y el desarrollo socioeconómico del país (PIF-Salud)”.
Dos sectores de formulación de política fueron objeto de nuestros esfuerzos y aportes técnico políticos: ciencia, tecnología e innovación, y propiedad intelectual. En materia de regulación, el semáforo PIF-Salud se implementó en varios de los borradores de resoluciones y decretos, alertando entorno a la favorabilidad al fortalecimiento de de la producción farmacéutica nacional.
El Comité de Veeduría y Cooperación en Salud sin duda representó un valioso espacio de articulación y suma de fuerzas para incidir en temas de alta relevancia como la posible declaración de interés público de medicamentos, y coyunturales a propósito de la emergencia nacional, todo un honor para Misión Salud presidir y coordinar este Comité.
Como parte del nuevo momento de Misión Salud, transitamos por procesos de reingeniería así como desafíos de sostenibilidad organizacional, esperemos que este impulso proyecte y atraiga más y mejores escenarios en pro del derecho y acceso a la salud.
